1. Prioriza tus necesidades básicas y deudas

Antes de gastar, asegúrate de cubrir lo esencial:

• Alimentos
• Servicios básicos
• Medicamentos
• Deudas con intereses altos

Tip: ¿Tienes deudas con tarjetas de crédito o préstamos? Este es un buen momento para reducirlas.

2. Ahorra al menos el 20% del bono

Destina una parte del bono a un fondo de emergencia o ahorro a mediano plazo. Si puedes ahorrar más, ¡mejor!

Tip: Meta sugerida: tener al menos 3 meses de gastos cubiertos en tu fondo de emergencia.

3. Invierte en tu futuro

Considera usar parte del bono para:

• Cursos o certificaciones
• Herramientas para tu negocio
• Aportes voluntarios a tu jubilación

Tip: Invertir en ti mismo es una de las mejores decisiones financieras.

4. Evita compras impulsivas

El bono puede tentar a gastar en cosas innecesarias. Antes de comprar, pregúntate:

• ¿Lo necesito realmente?
• ¿Puedo conseguirlo a mejor precio?
• ¿Afectará mis finanzas a largo plazo?

Tip: Haz una lista de prioridades antes de salir de compras.

5. Planea un gusto con conciencia

No todo tiene que ser ahorro o inversión. Puedes darte un gusto, pero con un presupuesto definido.

Tip: destina un 15% del bono para algo que disfrutes ¡sin culpa!